martes, 29 de diciembre de 2009

Desmembrada

Piernas enteras, ingles, axilas, cejas y bigote.

Estoy segura de que no hace falta que diga nada más para que se entienda a qué hace referencia esta lista: cita con la depilación express pre nochevieja.

Y digo yo. ¿A quién coño se le ocurrió, un día por allá el siglo que fuera, la maldita idea de desmembrarnos, cual sádicos sin mejor cosa que hacer que arrancarnos piel de nuestra piel, para lucir como floreros lo que en realidad no luce por invisible y escondido?

Lo que me da más rabia es que ahora, pasada la agonía de los tirones (que no os engañen, la depilación duele), no puedo negarlo: me siento mejor, más guapa, más limpia, más sexy.

¿Tanto me han sorbido el coco las deslumbrantes piernas de los anuncios publicitarios y las escenas de poca ropa del séptimo arte, que al verme desnuda como mi madre me trajo al mundo, con todos los puntos y comas, no puedo ver en mi la belleza natural que tengo?

jueves, 24 de diciembre de 2009

¡UN HURRA POR LA NAVIDAD!

Cuando era una niña para mí la Navidad era una fecha súper esperada del calendario, junto con las vacaciones de verano y las colonias/convivencias anuales que organizaba mi colegio. Después, con el paso de lo años, esas fechas acabaron por dejar de gustarme, ya que esos días me ocurría algo que el resto del año apenas me pasaba: me embargaba una profunda tristeza.
Si durante el año era una persona alegre, positiva, que evitaba revolcarme en la miseria, intentando siempre llevar una sonrisa en la cara (esa es mi filosofía de vida) en Navidad me volvía nostálgica y melancólica.

Y ahora, por suerte, la Navidad me produce indiferencia. No me pone triste, pero tampoco tengo espíritu navideño. Aunque hay algo que me preocupa, y es que en esas fechas de repente el mundo se llena de gente muy necesitada. Y claro, abundan las campañas solidarias. Luego, el resto del año, parece que ya no hay tanta gente que se muere de hambre ni que necesita que la apadrinen porque las campañas y los actos solidarios se reducen notablemente…Así que lo mejor sería que no fuera nunca Navidad...Pero hay una cosa que está bien, y es que sin darte cuenta te llevas bien con el resto de personas con las que compartes un apellido, a pesar de que los 11 meses restantes del calendario no te hubieras ido con ellos ni a la vuelta de la esquina.

Y ahora ya enserio, lo único realmente bueno para mí de la Navidad es la comida. Porque, en la medida de lo posible, en mi casa se compran cosas que durante el año comemos en contadas ocasiones (si es que llegamos a comer), y en Navidad lo comemos varias veces. ¡VIVA LA NAVIDAD!

martes, 22 de diciembre de 2009

VAYA PUTADA

Estas cosas siempre le pasan a los demás…Y lo que a mí me pasa es que otro año más me toca perder…
No hace mucho que suelo comprar lotería de Navidad, pero desde que tengo uso de razón en mi familia la compran y se la regalan los unos a los otros. Este año he comprado dos números, este año sí necesitaba el premio, este año podría haber evitado que mi familia se quede en la puta callen por culpa de la crisis, este año sí me incluía en el grupo de personas que se merecen ganar. Y es que siempre he pensado que todos aquellos que tienen mucho más de lo que necesitan no se lo merecen tanto, que el premio debe caer en una familia que realmente pase estrecheces. Pues este año mi familia es esa familia.
Pero aquí estoy, con ganas de llorar. Porque aunque mi optimismo recalcitrante me obliga a pensar que soy afortunada porque tengo salud, una familia y me espera un plato de comida caliente en la mesa… ¡A la mierda!¡ Que paso! ¡Estoy harta de pensar siempre en lo bueno! Así que grito: ¡VAYA UNA PUTADA!¡NO ME HA TOCADO LA LOTERÍA!

domingo, 20 de diciembre de 2009

Un, dos, tres...¿ménage?


Mi chico y yo hemos hablado muchas veces de hacer un trío. Quizás pueda sonar frívolo e incluso repulsivo para algunas personas, pero lo cierto es que se trata de una fantasía muy común.

Ahora bien, el motivo de excitación no es para todos exactamente el mismo. Mientras que algunos sueñan con poder estar con dos personas a la vez, otros lo que quieren es ver a su pareja con otra persona. ¿Es una locura?

Yo no lo tengo claro. A veces creo que que me gustaría que alguien nos observara, otras ver a mi chico con otra mujer, otras estar yo con dos hombres...
Sin embargo, cuando hablamos del tema, aparte de llevarnos un calentón de tres pares de narices, sólo conseguimos rayarnos y zanjar el asunto hasta mejor ocasión, y me quedo con un sabor agridulce y la autoestima más baja durante unos cuantos días.

Ojalá fuera capaz de separar amor de sexo. Ojalá pudiera ser capaz de perder las inseguridades, los miedos y los tabúes, y me atreviera a vivir la experiencia.

Por suerte o por desgracia, no estoy preparada, ni sé si llegaré a estarlo nunca.

martes, 15 de diciembre de 2009

Los amigos de mi novio son mis amigos

Mi chico, X, tiene un muy buen amigo, Y, que, definitivamente, me pone. Es así, para qué negar la evidencia…Me siento súper atraída por él, tanto física, como intelectualmente.

X e Y tocan juntos en un grupo de música, y hace varias semanas tuvieron un bolo. Ese día yo sólo tenía ojitos para X, la verdad es que se me cae la baba cada vez que le veo encima de un escenario, pero hoy, revisando algunos vídeos del bolo y de otras actuaciones en las que participaba Y sin X, me he puesto súper cachonda viendo a Y. Es sexy, inteligente, divertido…es más, en muchos aspectos soy más compatible con Y que con X. Y encima para colmo, es súper “apañao”. El mismo finde del concierto, nos invitó a X y a mí a comer a su casa, y cuando llegamos la mesa estaba puesta, había un aperitivo preparado, sonaba música y él estaba en la cocina acabando de preparar el plato principal, vestido algo más arreglado que de costumbre. Vamos, que si no hubiera estado X presente hubiera sido una comida romántica en toda regla (o qué más me hubiera gustado a mí, jejejje).

El caso, es que, aunque lo mío con X acabara algún día (de momento estoy súper feliz, llevamos una buena racha) jamás podría liarme con Y. ¿O sí? ¿Está muy feo liarse con amigos/as de tu ex? ¿Y con el/la ex de tu amigo/a? Es curioso, porque siento que hay una barrera mucho más infranqueable entre yo y los novios o los ex de mis amigas que entre yo y los amigos de mi novio…

Pero en fin, a pesar de las ganas, jamás sería capaz de liarme con un amigo de X, ni siquiera si X pasara a ser ex (aunque nunca digas de esta agua no beberé). Porque quiero a X y aunque nos fuera mal le desearía lo mejor, así que no me gustaría que sintiera ese tipo de traición en sus carnes, y además, a partir de ahí, perdiera al mejor de sus amigos...Y es que estoy segura de que X jamás se lo perdonaría a Y, pero aunque así fuera, no creo que pudieran volver a tener la misma relación que antes de haber sido víctimas de la misma mujer…hoooo…qué peliculero ma quedau.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Mamá, quiero un perro

Llega Navidad y muchas familias con niños pequeños se acercan a las tiendas de mascotas para escoger una bola de pelo con la que entretener los momentos de tedio familiar. En estos sitios, que desafortunadamente siguen exponiendo a los animales en diminutos habitáculos como si de cualquier mercancía se tratara, jamás piensan en el bienestar de esos animales. Su único objetivo es vender y de la manera más rentable posible, así que raras veces informan a los futuros cuidadores de los inconvenientes y gastos que supondrá para ellos llevarse un animal a casa.

Por eso, desde la humildad de este pequeño espacio en la blogosfera, quisiera recordar a todos aquellos que estén pensando en adquirir un animal de compañía lo que supondrá, en líneas generales, la llegada de ese nuevo amigo.

1. Gastos veterinarios: Seguimiento anual, vacunas, esterilización, enfermedades, etc. Un promedio de 300€ anuales.

2. Alimentación: Aunque hay marcas muy baratas de comida para mascotas, no olvides que en cuestión de alimentación, lo barato corresponde a la comida basura de los humanos. Si mejoras su alimentación criarás un animal más sano y que a la larga tendrá menos problemas de salud y carácter.

3. Juegos y atenciones: No olvides que tu nuevo amigo no es un muñeco y necesitará que le des cariño, que juegues con él, que respondas a sus necesidades "sociales". También comportará un gasto en accesorios.

4. Paseos: Si tu nuevo compañero es un can, deberás sacarlo a pasear mínimo dos veces al día, 30 minutos cada vez.

5. ¿Qué harás cuando quieras viajar?: Piensa si tienes alguien de confianza que pueda ayudarte si vas a realizar un viaje.

6. ¿Qué harás si llega una crisis financiera al hogar?

7. ¿Estás seguro de que quieres asumir una responsabilidad para tanto tiempo?: Un perro suele vivir 13 o 14 años, un gato puede incluso llegar a los 19 o 20.

8. ¿Cuánto tiempo pasas en casa a la semana?: Los animales doméstico necesitan que sus cuidadores pasen tiempo con ellos, y a veces nuestros compromisos profesionales y personales nos hacen pasar casi todo el tiempo fuera de casa.

Por último recordaros que al año se abandonan más de 200.000 perros y gatos en este país. La mayoría mueren en las calles incapaces de adaptarse a un entorno para el que no están preparados, otros tienen más suerte y son recogidos por protectoras o particulares que les ayudan a buscar un nuevo hogar:


viernes, 11 de diciembre de 2009

Atrapada

Hasta los 18 años más o menos hice mucho deporte, así que entre la benevolente adolescencia con el cuerpo y el ejercicio se podría decir que tenía una buena figura, que estaba buenorra vaya, a pesar de que comía mucho y mal (en mi casa siempre hemos hecho una dieta muy mediterránea pero siempre que comía fuera aprovechaba para zamparme toda las guarradas que me apetecían). Después, al empezar a trabajar y estudiar tuve que dejar de hacer deporte de golpe, y claro, mi cuerpo adoptó formas que desconocía. Pero aún así, más o menos, mantenía un peso adecuado, y aunque siempre pensaba que me sobraban un par de kilos, no me amargaba la idea, sobretodo porque con todo lo que comía ya podía darme con un canto en los dientes.

Pero me acabo de dar cuenta de que llevo una gorda dentro, de que en verdad yo soy una persona opulenta, obesa, sólo que atrapada en un cuerpo de mujer normal. Y esa persona que vive dentro de mí, cada vez se esfuerza más en salir, y yo tengo que esforzarme cada vez más y más en mantenerla a ralla dentro de su jaula. Y es que paso mucho tiempo pensando en comer, tomo muchas decisiones del día a día en base a la comida…la comida es para mi como el sexo para los chicos (¿no dicen que un hombre piensa en el sexo unas 300 veces al día?).

En resumen, que para mí la comida es algo más que una necesidad fisiológica y uno de los placeres de la vida…Pero tengo un plan: una buena dieta (entendiendo como dieta conjunto de alimentos que se consumen habitualmente y no como privación) y deporte, a ver si consigo mantener a mi álter ego zampabollos a ralla…

martes, 1 de diciembre de 2009

Peces de ciudad




Se peinaba a lo garçon
la viajera que quiso enseñarme a besar
en la gare d’Austerlitz.

Primavera de un amor
amarillo y frugal como el sol
del veranillo de san Martín.

Hay quien dice que fui yo
el primero en olvidar
cuando en un si bemol de Jacques Brel
conocí a mademoiselle Amsterdam.

En la fatua Nueva York
da más sombra que los limoneros
la estatua de la libertad,

pero en desolation row
las sirenas de los petroleros
no dejan reír ni volar

y, en el coro de Babel,
desafina un español.
No hay más ley que la ley del tesoro
en las minas del rey Salomón.

Y desafiando el oleaje
sin timón ni timonel,
por mis sueños va, ligero de equipaje,
sobre un cascarón de nuez,
mi corazón de viaje,
luciendo los tatuajes
de un pasado bucanero,
de un velero al abordaje,
de un no te quiero querer.

Y cómo huir
cuando no quedan
islas para naufragar
al país
donde los sabios se retiran
del agravio de buscar
labios que sacan de quicio,
mentiras que ganan juicios
tan sumarios que envilecen
el cristal de los acuarios
de los peces de ciudad

que mordieron el anzuelo,
que bucean a ras del suelo,
que no merecen nadar.

El Dorado era un champú,
la virtud unos brazos en cruz,
el pecado una página web.

En Comala comprendí
que al lugar donde has sido feliz
no debieras tratar de volver.

Cuando en vuelo regular
pisé el cielo de Madrid
me esperaba una recién casada
que no se acordaba de mí.

Y desafiando el oleaje
sin timón ni timonel,
por mis venas va, ligero de equipaje,
sobre un cascarón de nuez,
mi corazón de viaje,
luciendo los tatuajes
de un pasado bucanero,
de un velero al abordaje,
de un liguero de mujer.

Y cómo huir
cuando no quedan
islas para naufragar
al país
donde los sabios se retiran
del agravio de buscar
labios que sacan de quicio,
mentiras que ganan juicios
tan sumarios que envilecen
el cristal de los acuarios
de los peces de ciudad

que perdieron las agallas
en un banco de morralla,
en una playa sin mar.

Título: Peces de ciudad
Año: 2002
Letra: Joaquín Sabina
Música: Joaquín Sabina y Pancho Varona
Disco: Dímelo en la Calle (2002)