martes, 21 de diciembre de 2010

Mi última entrada - "condiós"

Nooooo, no es mi última entrada en el blog, es la última entrada que voy a dedicar a hablar de X, me explico.

No sé si hago lo correcto, pero cuando algo me apena, me entristece, me preocupa, y no puedo solucionarlo, cuando lo único que puedo hacer es superarlo o aprender a vivir con ello, mi táctica es intentar no pensar. Intento desconectar, hacer como si ese algo no existiera. Por ejemplo, intento no pensar en que X ya no va a formar parte de mi vida nunca más y que probablemente ahora estará follándose a una tal Lidia. Vale, que me acuerde ahora no cuenta.

X siempre me decía que de esa manera no me enfrentaba a las cosas y no las superaba. Pero yo pienso que cuando algo no puede ser y además es imposible, para qué te vas a recrear en ese pensamiento. Pues ya está, a otra cosa mariposa.

Entonces, me concedo un día de desahogo. El sábado lloré mucho, y no digo que no vaya a hacerlo más, pero intentaré esquivar ese momento como sea. ¿Es eso ponerse una venda y no querer ver que me jode, me jode mucho que ya no me quiera? Puede ser, pero funciona. Y así hasta que un día, ya no tienes que mirar a otro lado cuando te embarga la tristeza, porque ya se ha esfumado.

Así que como decía, me concedo un día de luto, de desahogo, de recrearme y llorar lo que se dice agusto, pero pasado ese día, a las penas puñalás. Pienso en las cosas que me satisfacen, y a ello que voy. Que me quiero pegar un atracón de nutella, pues me lo pego. Que me apetece salir a bailar, pues llamo a mis amigos. Que me apetece fumar, pues fumo. Pero sobretodo, intento no pensar, tanto, que aunque normalmente necesito contar mis cosas y compartir mis movidas con mi gente, en estos casos, lo hago menos, todo con tal de acordarme lo menos posible. Así que cuando no quiero hablar de algo o lo resumo muy resumido, es por que ese algo me afecta de verdad.

Y en fin, lo de siempre, intento pensar en las cosas buenas de la vida, pensar que todo pasa y que todo el mundo supera, en este caso, un desamor (para ello me ayudáis mucho con los comentarios sobre vuestras experiencias) y en seguir con mi vida adelante, con mis proyectos, mis ilusiones.

¿X?¿Quien coño es X?¿Ese gilipollas atormentado, neurótico, egocéntrico y egoísta?Pues no, no me suena... tralarí, tralará...(sigo recogiendo flores por el campo).

Es inevitable que a lo largo del día me den punzadas cuando me venga su recuerdo a la cabeza, y al principio cuesta mucho que no me embargue la tristeza y la melancolía, pero oye, cada vez cuesta menos, cada vez cuesta menos volverle la espalda y hacer como que no he visto (sentido) nada.

Esa es mi táctica, no pensar.

Así que, no puedo asegurar que jamás de los jamases volveré a hablar de X en el blog, pero al menos durante un tiempo, intentaré no hacerlo.

Así que esta es la última entrada que le escribo.






Este bálsamo no cura cicatrices,
esta rumbita no sabe enamorar,
este rosario de cuentas infelices
calla más de lo que dice
pero dice la verdad.
Este almacén de sábanas que no arden,
este teléfono sin contestador,
la llamaré mañana, hoy se me hizo tarde,
esta forma tan cobarde
de no decirnos que no.
Este contigo, este sin ti tan amargo,
este reloj de arena del arenal,
esta huelga de besos, este letargo,
estos pantalones largos
para el viejo Peter Pan.
Esta cómoda sin braguitas de Zara,
el tour del Soho desde un rojo autobús,
estos ojos que no miden ni comparan
ni se olvidan de tu cara
ni se acuerdan de tu cruz.
No abuses de mi inspiración,
no acuses a mi corazón
tan maltrecho y ajado
que está cerrado por derribo.
Por las arrugas de mi voz
se filtra la desolación
de saber que estos son
los últimos versos que te escribo,
para decir "condios" a los dos nos sobran los motivos.
Esta paya tan lejos de su gitano,
este penal del Puerto sin vis a vis,
esta guerra civil, este mano a mano,
estos moros y cristianos,
este muro de Berlín.
Este virus que no muere ni nos mata,
esta amnesia en el cielo del paladar,
la limusina del polvo por Manhattan,
el invierno en Mar del Plata,
los versos del Capitán.
Este hacerse mayor sin delicadeza,
esta espalda mojada de moscatel,
este valle de fábricas de tristeza,
esta espuma de certeza,
esta colmena sin miel.
Este borrón de sangre y de tinta china,
este baño sin rimmel ni nembutal,
estos huesos que vuelven de la oficina,
dentro de una gabardina
con manchas de soledad.
No abuses de mi inspiración,
no acuses a mi corazón
tan maltrecho y ajado
que está cerrado por derribo.
Por las arrugas de mi voz
se filtra la desolación
de saber que estos son
los últimos versos que te escribo,
para decir "condios" a los dos nos sobran los motivos.

12 comentarios:

  1. Ay Juno... estoy igual que tú, aunque yo lo llamo "cerrado por reformas". Es que te leo y es como si lo hubiese escrito yo misma, ya que también estoy en la fase de "no pensar en él", aunque resulte difícil.
    ¡Vamos a mirar p'alante, guapa! Que seguro que algo muy bueno nos espera a la vuelta de la esquina!

    Un beso muy grande y ánimo!

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  2. Lo sigues teniendo clarísimo,JUno.Tanto,que no ha lugar para consejos.
    Solo esto: el teorico lo tienes aprobado;a ver que pasa con el práctico. ;)
    Un abrazo gigante!!!

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  3. Hola Juno! Pues ya sabes lo que pienso yo, que uno no puede pasarse la vida metiendo debajo de la alfombra la suciedad, pero bueno, lo importante es que tú estés bien.
    Ánimo guapa!

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  4. Hay que tirar todo lo que no sirve!!!

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  5. Hola Julia, seguro, segurísimo, que no hay mal que por bien no venga. Seguro, segurísimo que hay algo bueno a la vuelta de la esquina.
    Hola el gato, ais...tú siempre tan sabio, porque es cierto, la práctica no la llevo tan bien.
    Hola Lorena, tienes razón, pero es lo que tienen los altibajo, y la entrada les cribí en un alti, a la hora de la verdad, no es tan fácil como lo escribí.
    Hola Jo T, esa es la intención, pero reconozco que hace fata tiempo.
    Besotes para todos

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  6. Hola Juno:

    Como se suele decir "siempre para adelante, para atrás ni para coger carrerilla", lo que esta muerto lo único que hay que hacer es enterrarlo y seguir con tu vida, aunque de vez en cuando duela.
    Un besete y mucho animo

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  7. Hola! Es muy bueno todo lo que has escrito, es cierto que tenes que dejar de pensar en el y todo eso, pero tampoco para que oprimas todos los sentimientos que tengas... osea, si queres llorar, llora! si queres escribir de él, escribilo... desahogate! no te comas todos los sentimientos que un dia te van a dar nauseas y te harán vomitar. Tengo conocimiento de causa y tambien un diario lleno de catarsis y sé que no es facil vivir así, pero te garantizo que se puede salir adelante.
    un abrazo y los mejores deseos!
    Pd: a él ni en figurita eh... ;)

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  8. Pues yo creo que es lo mejor que puedes hacer... ignorar que existe!... no es que estés escondiendote de los problemas, es que el problema seria seguir pensando en él!!
    Este chico ya no quiere nada contigo, que has de pensar al respecto?... pues que no ha sabido valorar lo que tenia... que le dén!!
    Y tu a seguir con tu vida, que hay muchas cosas provechosas en las que pensar como para estar perdiendo el tiempo en un tio que no ha estado a tu altura.

    Un besazo y ánimo!!

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  9. Hola un ratón, en esas estoy, muchas gracias por los ánimos solete.
    Hola Essilenna. Es cierto, si tengo ganas de llorar debo hacerlo, pero me refiero a que no quiero recrearme, sino hacer lo posible para no tener ganas de llorar.
    Hola Onara, pues sí, "Que te den" de Amparanoia es una de mis canciones preferidas ahora, jajaja
    Besos a las tres

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  10. Anónimo4/1/11 09:41

    Hola...soy nueva por aquí...sólo comentarte que haces muy bien en intentar no pensar...una cosa es meter la cabeza en la arena,que es lo que probablemente trataba de reprocharte tu ex,y otra muy diferente es tirar para delante sin regocijarte en las ideas frustrantes y obsesivas que al final lo único que consiguen es que vayas cayendo en una espiral destructiva que puede acabar en depresión...vamos, lo que popularmente se vendría a llamar "remover la mierda". Lo que sí te aconsejo es que no te prohíbas pensar en él...y es que basta que nos prohibamos algo a nosotros mismos para que nos resulte imposible no hacerlo...y al final, sólo conseguirás sentirte frustrada todas las veces que te acuerdes de él...si en cambio lo enfocas de otra manera, es decir, premiándote por cada hora que consigas no pensar en él pero sin forzarte a nada, le darás a esto un enfoque más positivo y verás que evolucionarás antes hasta lograr el olvido.
    Recuerda que el tiempo es tu aliado, no te impongas grandes metas de un día para el otro, piensa que cada duelo necesita un tiempo para que las heridas puedan cicatrizar y nunca más volverse a abrir. Paciencia...los grandes poetas como Neruda ya lo decían: "¡Qué corto es el amor...y qué largo el olvido!"
    Ánimo!!
    Saxana

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  11. Hola Saxana, muchas gracias por el consejo, nunca lo había visto desde ese punto de vista, pero es una buena idea, premiar el tiempo que no piensas en él.
    Besazos

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  12. Bueno Juno, yo creo que mas bien es tu forma de pasar pagina no de eludir un tema. Mientras a ti te haga bien sigue con ello.

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